voy a des-hacerme de todo lo que te pertenece, de mis recuerdos, de tus canciones, de tus anécdotas y tus besos: voy a dejarnos.
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voy a olvidar nuestros recuerdos, porque me atormentan y no me dejan dormir, como ahora. cada vez que te recuerdo recuerdo mi pena, la rabia, tus celos, y a pesar de lo diabólico que suena, me gusta sufrir por tí, creo que de lo contrario ya te habría olvidado por completo.
quizá nuestra historia no fue tan maravillosa, tan onírica como lo planeamos, fuimos dos actores en escena, en escena durante años con sólo un breve cierre de telón.
teníamos el guión perfectamente memorizado, y nos obligamos a creer que todo lo que decíamos, todo lo que soñábamos era la voz de nuestros corazones.
nos resignamos y terminamos volando juntos, con amores paralelos (tú más que yo) y creyendo que nos necesitábamos más de lo que realmente nos extrañábamos, la lejanía es la mejor cura pal' mal de amor, dicen, pero yo esas historia yo ya no me las compro: si fuera cierto violeta habría olvidado a runrún inmediatamente luego de su partida.
ya no creo en nuestro futuro, no creo en nuestros sueños, y me angustia ver nuestros dibujos en mis cuadernos, tus recuerdos en mi cuaderno de física y mis cartas que nunca te entregué.
me olvidé de tus lágrimas y de tu palpitar, de mi corazón agitándose en tus manos, me olvidé de tu sombra, de tus cruz ensangrentando mi cama.
te mato, te aplasto con mis ideas, te quiebro como una hoja de otoño en la cerámica fría de tu vida, de tu ajetreo inconsciente.
te estrujo con mi pelo, te enredo entre mis miedos, te canto con mi alma, y con el bombo de camilo hago una oda a tu nariz cruda, a tu perfil triste, a tu voz que me revuelve.
te escribo, te miento y me miento a mi también, juego a estar con otros y sigo recordándote.
te sueño, te busco, te encuentro y me vuelvo.
te espero.